De Il Cavallino al Purosangre: la historia de Ferrari es un eterno conflicto entre tradición y modernidad
Si hay una marca mística en la automoción esa es Ferrari. Desde luego, no hay datos que puedan sostener esa afirmación pero si le preguntas a un niño cuál es su deportivo ideal, probablemente, te dirá: deportivo y rojo . Y es que, Il Cavallino es, en el imaginario colectivo, mucho más que una marca de coches. Ferrari es, para muchos, lujo, dinero y ostentación. Pero también es competición. De hecho, sin el automovilismo no tendríamos a Ferrari... y el automovilismo también sería otra cosa. No sabemos si mejor o peor, pero seguro que sería distinto. El origen de la Scuderia De hecho, la competición es tan importante para Ferrari que se refleja en las propias siglas de su escudo. SF (Scuderia Ferrari) da una pista de su origen. Y es que éste se encuentra en 1929, año en el que Enzo Ferrari comenzó a competir en Italia, país en que las carreras de coches estaban en auge. De hecho, no fue hasta 1947 cuando comenzó con la fabricación de automóviles para la calle. Hasta entonces, Enzo